Los Templarios buscan La Cueva de Hércules y La Mesa de Salomón en Toledo. Están dispuestos a invertir y financiar todo lo que sea necesario. Las autoridades eclesiásticas y civiles de Toledo, del Gobierno de Castilla La Mancha, y hasta el mismo Vaticano contemplan con terror el nuevo panorama de fuertes iniciativas que buscan la transparencia y el descubrimiento del Secreto de Toledo...
La Jerarquía Católica y autoridades, cada vez más acorralados, intentan desacreditar la realidad de La Cueva de Hércules, pues en cuanto salga a la luz pública el Recinto Sagrado de Salomón, según aseguran las profecías medievales toledanas, acontecerá irremediablemente el Fín dramático y fulminante de la Iglesia Católica y el principio de una hecatombe sin precedentes y gran consternación que se extenderán por toda la Tierra.
¿Cumplirán los templarios su venganza final contra el mismo Vaticano que en el siglo XIV quemó en la hoguera a los monjes guerreros y disolvió su Orden?....
Muchos son los intereses de los Templarios para hallar la Cueva de Hércules. Pues su propio nombre de templarios lo tomaron del Templo de Salomón, y este Recinto Sagrado fué construído en el año 1037 a.C por el Rey hebreo Salomón, siendo una herencia más, de sabiduría y de tesoros, de este magnífico Rey.
Además en su interior reposa La Mesa de Salomón, nada más y nada menos, buscada con tanta ahínco y tenacidad por los monjes guerreros a lo largo de mucho tiempo.
Y paralelamente, por si todo ello fuera poco, las profecías anuncian que la próxima vez que se entre en La Cueva de Hércules, se producirá el hundimiento del Vaticano y de la religión católica en toda la Tierra.
Con lo cual, éste podría ser el gran momento histórico de venganza final que los caballeros del Temple han tenido que esperar durante siglos para terminar con sus mayores enemigos, el Vaticano, por haber arrojado vivos a las llamas de las hogueras a sus antepasados y exterminado todo vestigio de la Orden del Temple.
Otro interés del Temple en hallar La Cueva de Hércules es que una vez provocado el cumplimiento de la Profecía del Fín de la Iglesia Católica, el Vaticano dejaría de existir, y por tanto, la Orden del Temple, con todas sus ramas extendidas por el mundo, reclamaría la recuperación de todos los bienes templarios originales, como tierras, castillos, objetos, archivos, bibliotecas, etc.. que la Iglesia Católica de Roma, representada en ese momento por el Papa Clemente V, y la Monarquía francesa, representada por el Rey francés Felipe IV, confiscaron al Temple después de disolver la Orden, quedándose con todos sus bienes y tesoros.
Toledo, una olla a presión a punto de estallar
Cada vez hay un clima más enrarecido en la Ciudad Imperial. Soplan vientos de desacuerdos y desconfianzas hacia las versiones oficiales de las autoridades. Ordenes, sociedades secretas y discretas, asociaciones, y grupos de todo tipo, de investigadores, de estudiantes, culturales, etc.., cada vez toman más la iniciativa en sus propias Búsquedas e informaciones.
Pero la desconfianza se respira por toda la ciudad. Porque otro malestar palpable en la sociedad toledana afecta al cuerpo de abogados, a raíz de que uno de sus miembros, el letrado Oscar Marín, fué amenazado por las autoridades municipales con arruinarle la vida si intentaba interesarse por La Cueva de Hércules. A partir de lo ocurrido con el caso de la Cueva de Hércules, los letrados no pueden sentir seguros sus derechos, y se han visto humillados por los poderes locales.
Los medios de comunicación no se salvan, y la ley de la mordaza está a la orden del día. Entre los periodistas de la ciudad son conocidas las presiones del poder consistorial hacia Efe Toledo, y la censura impuesta en RTVCM y en todos los demás medios para no hablar lo más mínimo ni de Alberto Canosa ni de la Cueva de Hércules.
Y en cuanto al común de los ciudadanos, los vecinos de Toledo, asisten atónitos a todo este espectáculo absurdo, y se preguntan qué diablos es lo que está pasando en su ciudad.
Hasta hace unos años los vecinos de Toledo confiaban en las declaraciones, programas y actuaciones de las autoridades. Pero después del escándalo de la Vega Baja y de la creación de la Plataforma ciudadana por Toledo esa confianza ya terminó, pues los propios vecinos son los que se ven obligados ahora a luchar para conservar el patrimonio histórico de la ciudad ya que los poderes local y autonómico han demostrado que les importa una higa la limpieza del Río Tajo al que han convertido en un caudal envenenado, al igual que el patrimonio histórico, pues prefieren destruir los restos visigodos de la Vega Baja o de la zona que sea con tal de dar pelotazos y especular sin escrúpulos con los terrenos históricos de la ciudad, no teniendo ningún reparo sino todo lo contrario, impulsando la construcción de urbanizaciones con chalets independientes y pareados, o lo que se tercie en construir.
Así que los vecinos ya empiezan a estar hasta el moño de las conductas inmorales e irresponsables de estos locos sin escrúpulos que dicen que administran la ciudad imperial, y así se han levantado en lucha movimientos populares como la conocida Plataforma de los ciudadanos por el Patrimonio de Toledo para defender la cultura y la historia de la ciudad de las barbaridades que perpetran los responsables municipales y autonómicos.
La moraleja o la enseñanza es que como nosotros mismos, los ciudadanos, no cuidemos de nuestro patrimonio, estos tíos se lo van a cargar todo; y lo que no se cargan lo esconden. Y una parte de ese patrimonio cultural común es la Cueva de Hércules, que mantienen escondida y cerrada a cal y canto a todos los españoles en un complot infame. Y después tienen la desvergüenza de lanzar órdenes de detención contra los investigadores que se molestan y trabajan para intentar salvar y recuperar verdaderamente el patrimonio de todos, acusándoles encima de atentar contra el patrimonio...
Los ciudadanos se preguntan por qué las autoridades civiles y eclesiásticas no tienen interés ni prisa ninguna en investigar o encontrar el patrimonio secreto de Toledo, por qué no están dispuestos a financiar ningún proyecto arqueológico en este sentido, y por el contrario sí que ponen todo tipo de pegas, leyes de prohibiciones, y muecas de escepticismo y burla cuando alguien nombra La Cueva de Hércules.
Muchos son los indicios, las señales y las pruebas. No queda más remedio que admitir que El Complot en Toledo está servido.
Se desata la Búsqueda final en Toledo
La Búsqueda para encontrar el Recinto Sagrado de Toledo, en los últimos tiempos, comenzó a principios de la década de 1990 cuando el investigador hispano-alemán y original descubridor de la Cueva de Hércules, Alberto Canosa, dió el pistoletazo de salida inicial para hallar la tan legendaria y magnífica nave.
Ahora el Recinto Sagrado del Rey Salomón en Toledo está siendo buscado por distintos grupos de diferente índole y con intereses diversos. Entre las iniciativas que hay dirigidas a este fin, existe un proyecto de investigación y búsqueda ideado por una organización templaria de peso internacional.
-"La Cueva de Salomón no existe". Esta es la repetida e inapelable sentencia emitida por todos los expertos, estudiosos y profesores de Universidades más serios y prestigiosos de España. Y por supuesto, esa es también la consigna, fija e inamovible, de todas las instituciones, administraciones y organismos de poder, tanto de Toledo, como de Castilla La Mancha y de toda España, posición ésta secundada y aplaudida entusiásticamente por la Alta Jerarquía de la Iglesia Católica, tanto en España como en el Vaticano.
Por ejemplo, según el profesor Fernando Ruiz de la Puerta, profesor de la Universidad de Castilla La Mancha y autor del libro "La Cueva de Hércules", el hecho de que la Mesa de Salomón pudiera encontrarse en la Cueva de Hércules es más bien una leyenda, pues la Mesa de Salomón como tal objeto y cosa física no existe en ningún lado.
Sin embargo, continúa Ruiz de la Puerta, la idea arquetípica de lo que es la Mesa de Salomón, está dentro de uno mismo. Sería un objeto de poder interior.
Para otros investigadores como por ejemplo Juan Eslava Galán, la Mesa de Salomón se encontraría más bien en Andalucía, concretamente en Jaén. Este habría sido el gran objeto de poder que estuvo buscando el párroco francés de Rennes le Chateau, Francois Berenger Sauniere, en tierras de España, llevándole primero a Toledo y después a Jaén..
Hay que decir una cosa con respecto a Jaén. ¿Por qué el clima cultural y ciudadano en Jaén es de pura normalidad, cordialidad y bienestar? ¿Y por qué en Toledo se concentran todas las sociedades y órdenes? ¿Por qué la atmósfera social y cultural de Toledo está encapotada, amenazando tormenta, con divisiones, prohibiciones, amenazas y censuras?
¿En cuál de los dos lugares sería más lógico que permaneciera oculto y en secreto un patrimonio histórico grandioso? Y es que la capital hebrea mundial fué ciertamente Toledo y no Jaén.
Hablar de Jaén es hablar de musulmanes, y la Mesa de Salomón nunca llegaron a verla los árabes. La reliquia sagrada reposa en la capital hebrea del medievo, Toledo.
Esto no quita, que hubieran podido circular copias de la Mesa, falsas, claro, por la cultura musulmán.
No hay mesa... No hay cueva... Pero las organizaciones toman posiciones y los caudales de dinero siguen corriendo para sufragar La Búsqueda.
Las autoridades de Toledo han llenado los rincones de la ciudad con prohibiciones, amenazas y vigilancia terrestre y aérea, tratando de impedir que nadie en absoluto pueda llegar a descubrir la legendaria Cueva de Hércules, con la excusa de que los gobernantes de la ciudad son muy diligentes y aplicados tomando medidas para proteger el patrimonio histórico de la ciudad, toda una tomadura de pelo y un delito cometido contra los vecinos de Toledo y todos los españoles.
La pantalla de cobertura está trazada perfectamente bien por todo Toledo para impedir el Descubrimiento, de tal manera, que aunque buscar la Cueva de hercules no está tipificado como delito, todavía, en Toledo, en la práctica, cualquier investigador que pretenda dar un solo paso hacia La Cueva acabará siendo detenido rápidamente y conducido al calabozo del Cuartel de la Guardia Civil. Tal es el terror que tiene el Vaticano a que salga a la luz este descubrimiento.
Así de difíciles han puesto las cosas en Toledo las mismas autoridades a las que les caerá todo el peso de la Ley en cuanto el recinto de Salomón salga a la luz pública, por ocultamiento del patrimonio público. Pero hay personas valientes, grupos y organizaciones que no se rinden.
Los Templarios llaman a la puerta
El día 12 de marzo de 2007 amaneció el buzón de correo del investigador Alberto Canosa con una carta. Al parecer, un filántropo estaba decidido a ayudar a encontrar la Cueva de Salomón.
Los contactos sucesivos, vía correo y telefónicos, mantenidos entre el donante y Alberto Canosa y Fran Garcia, aclararon que la persona en cuestión era el Gran Maestre de una Orden de Caballeros Templarios, arraigados en España y extendidos por todo el mundo. El contacto fué verificado como auténtico y fiable.
Los Templarios buscan La Cueva de Hércules. Y la Mesa de Salomón. Si después de todos estos siglos los caballeros del Temple continúan buscando La Mesa de Salomón es que, evidentemente, todavía no la han encontrado, a pesar de todos los dichos y leyendas que aseguran que sí dieron con este tesoro y otros muchos, tanto en Jerusalen como por todo el mundo.
Debido a que el sr. Canosa reside habitualmente en Alemania, se concertó una cita para hacer un primer contacto, a la que acudieron El Gran Maestre de la Orden Templaria y su acompañante protector, por un lado, y por otro, el investigador Fran Garcia, representando también a Alberto Canosa.
Al principio se preveía la cita en un lujoso Hotel de Madrid, pero finalmente el encuentro tuvo lugar en la madrileña población de Alcalá de Henares en forma de almuerzo en un afamado Restaurante de esta localidad cervantina, con fecha de 10 de abril de 2007.
Un millón de euros para abrir La Cueva de Hércules
¿Quién dijo que no había dinero para abrir la Cueva de Hércules? Ahí estaba, encima de la mesa. El presupuesto de los fondos consistiría en una primera entrega de 100.000 euros, seguida periódicamente, según las exigencias y el transcurso del tiempo, de otras cantidades similares de 100.000 euros, así hasta completar una cifra de 1 millón de euros, que representaría el presupuesto total de los fondos destinados a abrir la Cueva de Hércules a la luz pública.
El Gran Maestre, hombre informado y formado excelentemente en cultura y saberes, presentó adicionalmente un posible plan para abrir la Cueva de Hércules.
En el transcurso de la conversación advertí al Maestre que el descubrimiento de la Cueva de Hércules traería unas consecuencias catastróficas para la Iglesia Católica y era por ello que el Vaticano se oponía a abrir el Recinto Sagrado de Salomón.
Pero sabido es que templarios y Vaticano no se llevan muy bien, sobre todo después de la última conversación, poco amable, que tuvieron el 18 de marzo de 1314 junto a la Catedral de Notre Dame, en la que los monjes caballeros fueron quemados vivos.
Al menos en esto, en no fiarnos mucho del Vaticano, ambas partes coincidíamos. De hecho mi interlocutor me confesó que su orden había tenido problemas en el pasado con el Opus Dei. Buena señal. ¿Llegaríamos a trabajar juntos?
Hubo un intercambio de carpetas que contenían documentos de información. Después del café, el almuerzo terminó.
- Podeis contar con esos fondos - fueron las palabras de despedida del Jefe de la Orden Templaria.
Posteriormente, yo mismo, informé de todo lo tratado en la reunión a mi socio, el descubridor Alberto Canosa.
Transcurridas 24 horas, y valorados y analizados todos los elementos que convergían en esta posible colaboración, al final no hubo un acuerdo positivo entre ambas partes. Pues por nuestra parte consideramos que la obtención de esos fondos y el compromiso contraído con dicha Orden no dejaba suficiente espacio para nuestra libertad e independencia plena.
No hubo acuerdo entre los templarios y nosotros. Pero ¿eso significa que los templarios renunciarán a buscar la Cueva de Hércules y la Mesa de Salomón? ¿Renunciarán los Caballeros del Temple a sus ideales de encontrar las reliquias sagradas de poder?
El hecho de que nunca renunciaron a sus ideales es que todavía, después de todos estos siglos, siguen existiendo, y siguen interesados en los mismo proyectos que al principio del nacimiento de la orden en Francia y Jerusalen.
Desde aquí queremos agradecer la valentía, la generosidad, el gesto, y el interés demostrado por este Gran Maestre y su Orden de Caballería, y deseamos que esta acción sirva de ejemplo para todas las demás órdenes fraternales similares, así como para todas las organizaciones, instituciones y centros de enseñanza y universidades, investigadores particulares, etc...
A día de hoy, para vergüenza de las autoridades, ninguna administración pública no sólo no va a financiar ni un sólo céntimo para este proyecto sino que tratará de poner todas las trabas posibles y desacreditar a los investigadores. Así que tendran que ser las iniciativas privadas las que recuperen el patrimonio de todos.
El Recinto Sagrado del Rey Salomón de la Nueva Jerusalem, la capital hebrea en el mundo durante muchos siglos de la Historia, Toledo, no debe ser propiedad ni cortijo particular de ningun grupo religioso, político, asociación, fundación, u organización alguna, sino un lugar rescatado, después de 3044 años, para los toledanos, los castellano-manchegos, españoles y para todos los seres humanos del mundo, como verdadero Patrimonio de la Humanidad.
22 de Mayo de 2007
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